«El Oficio Divino (o las Horas Divinas) es una concreción de la tradición que se remonta a los inicios de la Iglesia. En los Hechos de los Apóstoles hay alusiones a una práctica de oración en las horas del día, en continuidad con el ritmo diario de la oración judía. En el siglo IV, este tipo de liturgia había alcanzado estabilidad: las laudes y vísperas se celebraban a diario, en comunidad (ELBERTI, 2011, p. 166). Según Eteria, la peregrina que relató la liturgia en Jerusalén, en ese mismo siglo, era una práctica diaria, vinculada a las horas, especialmente al anochecer y al amanecer, en memoria del crucificado-resucitado. Se contaba con la participación del pueblo, hombres y mujeres e incluso niños. Era una liturgia expresiva, no sólo con salmos e himnos, sino con gestos y símbolos, de manera sencilla y popular (Cf. ETÉRIA, 1977, n. 24,1-7). Este modelo de oficio celebrado en las catedrales, con toda la densidad bíblica y teológica, simple y accesible al pueblo, tendía a alimentar la vida del cristiano común.»
¿Qué son las horas divinas o oficio divino?
Es un programa diario para la oración y la práctica de las disciplinas espirituales que nos permite mantenernos conscientes de la presencia de Dios durante todo el día. Se trata de reconocer la Presencia de Dios durante todo el día en lapsos breves. Integrar las horas divinas o el oficio divino a la vida diaria puede ser difícil, pero notarás la diferencia en tu vida espiritual con tan solo integrar una de las horas a tu rutina diaria. Paulatinamente puedes integrar más según tu agenda y tu disposición.
Algunas recomendaciones:
Santa Cena: Puedes incluir el tomar los elementos de la Santa Cena en cualquier momento día en memoria del sacrificio de Cristo y en agradecimiento.
Himnos clásicos: Cantar o leer himnos clásicos cristianos nos puede conectar con la historia de la Iglesia y las verdades sobresalientes de las Escrituras. Podrías adquirir una copia de un himnario clásico o buscar en tu móvil bajo «himnos cristianos clásicos». He aquí una opción: https://www.himnoscristianos.net/
Oración bíblica: Los Salmos es un buen libro de oraciones, pero también hay oraciones en toda la Biblia. Puedes leer y meditar en alguna de esas oraciones. A continuación un documento online que contiene oraciones que podrías utilizar para tus tiempos de oración: https://www.sociedadbiblicacolombiana.org/wp-content/uploads/Oraciones_de_la_Biblia.pdf
Himno contemporáneo: Cantar o leer himnos contemporáneos cristianos nos puede conectar con la expresión fresca de adoración de la Iglesia de hoy y las verdades sobresalientes de las Escrituras que las canciones expresan. Una buena guía sería cantar o leer los himnos que tu pastor ha escogido para cantar en la iglesia. Disfruta este Playlist de Spotify:
https://open.spotify.com/playlist/7B7sK7FVsbv8uDig8zNy3K?si=HfmPKmpWQUK9vCHf1k5XTg
Comunión: Cuando meditamos en la Escritura debemos concluir la oración respondiendo a Dios sobre aquellas cosas que nos han gustado o llamado la atención de la lectura a manera de conversación. Ejemplo: Si lees Santiago 1:12: «Dios bendice a los que soportan con paciencia las pruebas y las tentaciones, porque después de superarlas, recibirán la corona de vida que Dios ha prometido a quienes lo aman»; podrías responder algo como esto: «Señor, quiero experimentar siempre tu bendición, ayúdame a soportar pacientemente este prueba o esta tentación (sé específico). Gracias por la corona de vida que me has prometido. Yo te amo. Amén.»
Puedes compartir tus tiempo de oración. Siempre es bueno tener tiempos a solas especialmente en la mañana, pero en ocasiones también sería beneficioso compartirlos con los miembros de la familia u otros creyentes.
A continuación una gráfica que ilustra las horas divinas y cómo se ubican durante el día.
One Comment
Samuel Santana
¡Asombroso! De verdad que este contenido es muy edificante 🙏🏼