Los dones milagrosos en Legado de Amor

Los dones milagrosos en Legado de Amor

¿Cuál es la posición de Legado de Amor acerca de los dones milagrosos (que generalmente incluyen lenguas, sanidad, profecía y milagros)?

Creemos que la regeneración (Tito 3:5) y el bautismo en el Espíritu (1 Corintios 12:13) ocurren simultáneamente cuando uno por gracia a través de la fe en Cristo (Efesios 2:8-9) se convierte en cristiano. 

Sabemos que la vida cristiana, incluyendo el principio, medio y fin, es imposible sin el Espíritu Santo (Romanos 8:9; Gálatas 3:2-3). Por lo tanto, estamos comprometidos a “ser llenos” (Efesios 5:18), un mandato presente continuo, y a “vivir por el Espíritu” y “andar por el Espíritu” (Gálatas 5:25). 

En Legado de Amor creemos que los dones milagrosos operaron como una marca de la presencia del Reino de Dios en la persona de Jesucristo el Rey y sus apóstoles, y son una marca hoy en día de la presencia del Reino de Dios en medio nuestro.  

El Espíritu Santo reparte los dones milagrosos como él quiere y cuando él quiere. No obstante la Biblia nos anima a pedir y anhelar los dones más útiles.

Creemos que la mejor señal exterior de estar lleno o bautizado del Espíritu Santo es el carácter transformado o el fruto del Espíritu (Gálatas 5:22-23). Aunque creemos en los diversos dones milagrosos como hablar en lenguas, no creemos que se requiera hablar en lenguas u otro don como una señal de estar bautizado en el Espíritu Santo o para vivir una vida cristiana plena. 

Sobre el hablar en lenguas

El hablar en lenguas es una manifestación milagrosa del Espíritu Santo por la cual podemos orar, alabar o profetizar inspirados por Dios en lenguaje desconocido por la persona que habla. Este lenguaje puede ser una lengua humana o angelical. 

Varios propósitos sobrenaturales vienen con el hablar en lenguas:

  • Evangelizar a personas de otras naciones sin saber su idioma
  • Oración privada eficaz (aunque no tenga interpretación)
  • Palabra de profecía, sabiduría o ciencia (requiere interpretación)

En ocasiones algunas personas hablan en lenguas mientras oran, predican o alaban en público. Creemos que si es de forma limitada (algunos breves momentos) no requiere una interpretación pues está dentro del contexto de la oración, la prédica o la alabanza, pero si la persona insiste en hablar en lenguas por mucho tiempo es necesaria la interpretación para que todos puedan entender. 

Algunos versos bíblicos sobre el hablar en lenguas: 

1 Corintios 12:10; Hechos 2:4, 6; Marcos 16:17; 1 Corintios 13:8; 1 Corintios 14:19; 1 Corintios 14:2; 1 Corintios 14:39; 1 Corintios 12:28; Hechos 19:6; 1 Corintios 14:27; 1 Corintios 14:13; Hechos 10:46; 1 Corintios 14:22; 1 Corintios 13:1; 1 Corintios 12:30; Judas 1:20. 

Sobre la sanidad y los milagros

La sanidad y los milagros son manifestaciones milagrosas del Espíritu Santo que tiene el fin de resolver problemas humanos de manera sobrenatural. El mayor milagro que sucede constantemente es la salvación del alma por medio de la fe en Cristo.

La sanidad de enfermedades físicas, espirituales o emocionales también son posibles si oramos con fe de acuerdo a la voluntad de Dios. Aún así los milagros a veces suceden como esperábamos y a veces no. Creemos que los obstáculos a lo sobrenatural están por lo general más relacionados a nuestra incredulidad que a la voluntad de Dios. No obstante, en ocasiones, es probable que dentro del plan maestro de Dios la respuesta a una oración por sanidad o milagro sea «no», o «no todavía», y de ser así, confiamos en que la obra de Dios siempre resultará en lo mejor según su buena voluntad. 

En Legado de Amor creemos que entre más ocasiones oremos por los enfermos y más ocasiones oremos por milagros más oportunidades para ver el Reino de Dios en acción tendremos. ¡Y lo hemos visto! 

Algunos versos bíblicos sobre la sanidad y los milagros:

Mateo 19:26; Hechos 2:22; Hechos 3:6-10; Hebreos 2:1-4; Mateo 13:58; Mateo 7:21-23; Marcos 16:17-18

Sobre la profecía

La profecía o palabra profética es un mensaje revelado por el Espíritu Santo, siempre basado en la Escritura (la mayor autoridad profética) para edificar, consolar y exhortar a las personas en su caminar con Dios en asuntos específicos. Para este fin la profecía puede venir acompañada de consejos sabios y/o revelación de información útil del presente, del pasado o del futuro de la persona o de ciertos asuntos.

Ninguna palabra profética puede contradecir las Escrituras (2 Pedro 1:19-21) o estar por encima de la Escrituras (la Biblia).

Algunos versos bíblicos sobre la profecía: 

1 Corintios 12:28-29; Romanos 12:6; Efesios 4:11; 1 Corintios 13:1-2; 1 Corintios 14:3-5; 1 Pedro 4:10; 1 Corintios 14:5; Hechos 2:17

¿Dios te ha dado uno o varios dones sobrenaturales?

Queremos darte la oportunidad de servir con tus dones a la congregación, pero debes seguir ciertos protocolos a continuación:

Membresía

Para poder servir con tus dones debes ser miembro en plena comunión o ser una visita autorizada por los pastores. 

Periodo de prueba

Todos los miembros de la iglesia con una palabra profética o fe para manifestar algún don milagroso para la iglesia o para un miembro o visitante debe siempre primero hablar con los pastores antes de dirigirse a cualquier persona y ellos son los que darán permiso y/o instrucciones adicionales. 

Aprobación

Luego de un largo periodo de prueba, entrenamiento y oración algunos miembros de la iglesia podrían recibir la aprobación pública para ministrar sus dones con mayor libertad siguiendo protocolos específicos del don. Los pastores, con el fin de cuidar la congregación de la falsedad o el desorden, siempre se reservarán el derecho de decidir el orden del servicio, la participación de los miembros, y de corregir con amor a miembros que usen sus dones de forma inapropiada. 

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